Teniendo en cuenta que nuestros pobres pies nos sostienen durante todo el día, qué menos que saber un poco más sobre la rama sanitaria (podología) que nos ayuda a mantenerlos sanos.
En los pies se encuentran el 25% de los huesos del cuerpo así que teniendo en cuenta la gran carga que soportan, es muy fácil que necesitemos acudir al podólogo al menos una vez en la vida.
1. ¿Qué es la podología?
La podología es un grado de ciencias de la salud a que se dedica a analizar, diagnosticar y tratar las patologías de los pies (incluidas las uñas), tobillos y piernas en algunos casos.
2. «el callista»
Ahora se llama “podólogo” o «podóloga» pero antiguamente se llamaba “el callista” Son, junto a médicos, enfermeras y odontólogos, los únicos profesionales sanitarios con autonomía para diagnosticar y prescribir fármacos. No dependen de otros profesionales de la medicina.
2. ¿Qué trata un podólogo?
Los podólogos tratan infecciones por hongos, uñas incarnadas, helomas, durezas, piel seca (anhidrosis), problemas derivados por la diabetes. El dolor de talón es una de las dolencias más comunes que se ven en la consulta. ¿Sabías que las uñas crecen más rápido en verano? Antiguamente se pensaba que las uñas seguían creciendo después de muerta la persona, pero la realidad es que una vez que se produce el fallecimiento, el cuerpo sufre una fase de deshidratación que provoca que la piel, así como otros tejidos blandos, se retraigan y en cambio el pelo y las uñas siguen intactas. Parece que crecen pero no es verdad que las uñas siguen creciendo una vez muerta la persona.
4. El sudor de los pies
El podólogo te puede ayudar a solucionar problemas de sudoración (hiperhidrosis) de los pies, y sus consecuencias olorosas (bromhidrosis). Una curiosidad es que en las plantas de los pies es dónde encontrarás más glándulas sudoríparas (unas 125.000 por pie) y terminaciones nerviosas sensoriales por centímetro cuadrado que en cualquier otra zona del cuerpo.
El podólogo también soluciona problemas relacionados con la sudoración
5. Dónde estudiar podología en Madrid
Mientras que en Madrid se puede estudiar el grado de Podología en tres universidades (la UCM en la Facultad de Fisioterapia, Enfermería y Podología, en la Universidad Alfonso X El Sabio y en La Salle Centro Universitario) en todo el territorio de Estados Unidos solamente se puede estudiar en nueve universidades.
6. Asignaturas que se estudian en el grado de Podología
La persona licenciada en Podología tendrá asignaturas en su carrera relacionadas con la anatomía y fisiología del pie y pierna, clínica podológica, química, artrología y miología del pie, asepsia, antisepsia y desinfección.
7. ¿Cuánto gana un podólogo?
El sueldo medio de un podólogo ronda unos 1.060 euros al mes. El sueldo mínimo en esta profesión empieza desde unos 12.000 euros brutos al año. Esta cantidad depende de la ciudad y el barrio que se esté comparando y por supuesto de la circunstancia personal y la retención que tenga asociada.
8. ¿Qué futuro tengo si estudio podología?
El profesional de la podología puede trabajar en hospitales o centros privados.
9. ¿Cuánto cuesta ir al podólogo?
La consulta de un podólogo ronda los 26€, dependiendo del motivo de la consulta (no es lo mismo un tratamiento que una cura, siendo ésta última más barata).
10. Quién es el mejor podólogo de Madrid?
¿Qué vamos a decir nosotros? Que el mejor podólogo de Madrid es Rubén de la Fuente! ¡Nuestro podólogo!
Independientemente del tipo de cirugía, la fisioterapia temprana es importante para la recuperación.
Referente en diatermia en Madrid
En la clínica Barrena Craus llevamos trabajando esta técnica más de tres años y tanto nosotros como nuestros pacientes estamos muy satisfechos con los resultados. La aplicación de esta técnica depende de la lesión y su grado y somos los especialistas quienes hacemos la recomendación de la aplicación de la misma. A partir del estudio del paciente se hace una evaluación y se decide cómo abordar las lesiones, si mediante técnicas como la diatermia, terapia miofascial, terapia manual… o una combinación. El objetivo es recuperar lesiones en el menor tiempo posible poniendo siempre la salud del paciente en el centro.