Ejercicio guiado por fisioterapeutas
El Ejercicio Terapéutico es la actividad física dirigida hacia personas con lesiones o patologías, cuya competencia es exclusiva de profesionales sanitarios.
De manera general podríamos dividir el ejercicio terapéutico en dos grandes áreas:
- Ejercicio Terapéutico Estructural.
- Neuromotor.
Estas dos áreas no son excluyentes entre sí, sino complementarias. El ejercicio terapéutico debe abordarse como parte de un tratamiento integral, al menos así lo entendemos en Barrena Craus, y puede complementarse según las necesidades del paciente con terapia manual; inducción miofascial, Reeducación Postural Global, Osteopatía, terapia manual …. O recursos de electroterapia como la diatermia o tdcs.

Ejercicio Terapéutico Estructural
El Ejercicio Terapéutico con objetivo estructural es el que se dirige al tejido diana identificado como causante del síntoma, ya sea articular, muscular, tendinoso o que englobe varios tejidos.
Se trata de dar al tejido un estímulo mediante una carga de trabajo con el objetivo de ganar fuerza, movilidad, o velocidad. En función de lo que necesite el paciente, la carga produce cambios en este tejido para que más adelante soporte las demandas a las que le someta el paciente. Lo importante es que se produzca una adaptación del tejido.
Cuando empezamos a correr y cada día aguantamos más, es porque nuestros sistemas cardiovascular, respiratorio y motor se han adaptado a las cargas que le hemos ido dando progresivamente. De esta forma ese tejido podrá desarrollar potencialidades como fuerza, velocidad o resistencia. Y de modo general, el paciente obtendrá mayor control y movilidad de esa zona específica.
La máquina de ejercicios de remo es de las más completas para ganar capacidad cardiovascular y fuerza
Cómo utilizar la máquina de remo
Con el fin de sacar el máximo provecho de nuestra sesión, es importante asegurarse de que estamos tomando la postura correcta.
Cuando hacemos uso de la máquina de remo, debemos, en primer lugar, asegurarnos de que nuestras piernas antes de tirar de la polea están semi flexionadas y brazos estirados , nuestra espalda se incline ligeramente hacia adelante y que nuestro agarre en las manijas sea firme pero no demasiado apretado.
Una vez que estamos en esta posición, podemos comenzar a realizar el movimiento, asegurándonos de que nuestros codos permanezcan doblados. Los codos tienen que llegar hasta nuestro costado y nuestras piernas han de estar empujando el asiento mientras tiramos de las asas hacia nosotros (el asiento solo se moverá en la máquina de trabajo cardiovascular).
Además, al final del movimiento, debemos asegurarnos de que nuestra espalda está recta y las escápulas juntas antes de volver a su posición inicial, siendo así más efectivo el trabajo
Errores a evitar cuando usamos la máquina de remo
Cuando hacemos uso de la máquina de remo, hay una serie de errores comunes que debemos evitar con el fin de sacar el máximo provecho de nuestro entrenamiento.
- La primera de ellas es la de no realizar un agarre correcto, ya que seríamos incapaces de realizar un movimiento efectivo, no obteniendo así ningún beneficio de nuestra sesión.
- Otro error común es el de no sentarnos correctamente en la máquina, ya que si no tenemos una postura adecuada, el trabajo de nuestra espalda y brazos no será efectivo, por lo que no obtendremos los resultados deseados y en el peor de los casos, lesiones.
- Por último, es importante prestar atención al movimiento que estamos realizando con nuestras piernas, ya que un uso incorrecto de las mismas puede afectar a nuestra espalda y brazos, haciendo que nuestra sesión sea contraproducente.
Conclusión
En conclusión, la máquina de remo es una máquina muy completa en términos de trabajo cardiovascular y de fuerza. Sin embargo, al igual que con cualquier otra máquina, es importante tener en cuenta la postura y la técnica correctas para evitar lesiones y aprovechar al máximo nuestra sesión.